El 5 de octubre de 1925 se realizó en Buenos Aires el Primer Congreso Panamericano de Carreteras. Desde entonces, se instituyó en la Argentina esta fecha como Día del Camino.
Qué palabra tan especial. Tan simple de escribir, no ofrece problemas de ortografía, gramática o sintaxis en absoluto; la utilizamos como una palabra más en nuestra vida diaria y cotidiana, la escupimos, la derramamos para llenar discursos como si nada... y sin emargo, pensándolo seriamente, es una palabra tan hermosa, tan llena de significado, con tanto por decir, con tanto por contarnos y compartir... Es una palabra que nos llena de energía y que, sobre toda las cosas, nos invita... ¿a qué? a tantas cosas!!! y tan diversas!!!
Caminos los hay, de los más variados tipos, los hay físicos y espirituales, los hay de asfalto, de ripio, de tierra, de luz, de ida, de vuelta, de autoconocimiento, de superación; de aire, de tierra, de agua, de encuentro...
Y solemos transitarlos, casi inconscientemente, todos los días de nuestra vida, que dicho sea de paso, también es un camino en sí misma. Y nos asombramos de sus maravillas, y nos apenamos con sus obstáculos, pero también nos sentimos más fuertes cuando podemos superarlos y seguir adelante con nuestro... camino.
Algunos los elegimos... a veces ellos nos eligen a nosotros... como sea, siempre vamos por alguno, con o sin rumbo fijo, y ojalá que siempre sea con la capacidad de disfrutarlo, de admiralo, de quererlo, de aprender de él y compartirlo con otras personas. Cada camino es único, y cada uno es único transitando por un camino. Y lo mágico es eso. Que es irrepetible, cada paso, cada camino andado, por más que sea el mismo físicamente, no será igual experencialmente (no sé si existe esta palabra pero no me importa, suelo inventar varias). Así que inentaré vivir cada segundo y cada momento de cada uno de los caminos que ande y desande con la mayor intensidad, para llevarme conmigo los mejores recuerdos, las mejores vivencias.
Y los invito a recorrer sus caminos con el mismo amor y las mismas ganas...
Cómo será de importante esta palabra, que ha inspirado a montones de artistas de toda índole:
"Sigue tu Camino sin mirar atrás" nos cantan los Auténticos Decadentes;
"Los Caminos de la Vida" se oye en la voz de Vicentico;
Diego Torres va "Abriendo Caminos";
"Caminante no hay Camino, se hace Camino al andar" nos profesa Antonio Machado;
"Y prendido a la Magia de los Caminos, el Arriero va..." decía Atahualpa (no por casualidad se ha elegido el título de este blog)
"Trashumante es mi destino, y esta copla que me lleva, descalzo por los caminos" Sí, Raly también nos inspira!
Y la lista sigue ineternum
